En la mañana del Jueves se dio inicio a la Visita Pastoral correspondiente a la Vicaría de Sahagún; la primeras personas en recibirlo fueron los adultos mayores de tercera edad, que reciben atención en el “Hogar Geriátrico Sión”, ahí con el sacramento de la Unción los sacerdotes de jurisdicción de las sabanas de Córdoba se dieron cita, presidió su Excelencia Rolón.

En esa primera jornada por Sahagún estuvo presto a las solicitudes e inquietudes de los asistentes, todo el tiempo en compañía de los sacerdotes  del arciprestazgo de esta zona pastoral, la acogida brindada por los abuelitos fue sencillamente sincera y cálida, sin el menor asumo de vacilación le dejaron muy claro al obispo su intención de hacerlo sentir parte de la gran  “familia Sión”.

Una vez finalizada esa primera parte de la jornada fue conducido hacia la Alcaldía Municipal según lo previsto en la programación vicarial, ahí fue acogido por la primera autoridad de ente territorial, el Doctor Baldomero Villadiego junto a su gestora social, quien luego de expresar formalmente su bienvenida le concedió la palabra al invitado Mons. Alberto R. Éste a su vez se dirigió a los presentes, valiéndose del tema acerca de la Justicia junto a esta virtud también, les expresó el valor del servicio para un funcionario público además de poner un marcado énfasis en el perdón, como ocasión para sanar y recuperar las heridas causadas y recibidas.

En las horas de la tarde, estuvo con los sacerdotes de la Vicaría Foránea en un diálogo cercano, fraterno con sus sacerdotes, quienes expresaron sus puntos de vista acerca del tema compartido y que terminó convirtiéndose en una muy sentida meditación acerca de la identidad sacerdotal, además de hacer unas recomendaciones prácticas acerca del mejor ejercicio del ministerio,  muy acorde a un jueves sacerdotal como el de hoy.

La jornada por la ciudad cultural finalizó con la Hora Santa y la Eucaristía concelebrada en la Parroquia San Juan, que contó con una muy notoria presencia de laicos de todas las parroquias de este municipio y de los aledaños a éste, una clara manifestación de la comunión eclesial.