Este segundo domingo de pascua es llamado DOMINGO DE LA MISERICORDIA y sea ésta la oportunidad para hacer una reflexión a partir de esta hermosa imagen que muestra la esencia de Dios que es rico en misericordia (Efesios 2, 4).
1. La imagen nos muestra al crucificado que ha resucitado, está de pie y tiene las huellas de la cruz; es el amor de Dios que nos invita a seguir, a avanzar, a estar de pie, no obstante las adversidades, dificultades y sufrimientos. Dios es misericordioso porque nos levanta, nos consuela y nos anima a seguir adelante.
2. De su costado sale sangre y agua, y lo vemos en los colores rojo y azul, es su amor y su vida que se dan a los hombres como rayos del sol; su misericordia es infinita para todos, no excluye, no discrimina.
3. Su mano derecha en alto nos bendice y nos invita a confiar en Él. Abandonarnos en su corazón misericordioso con nuestras cansancios y agobios porque en Él encontramos refugio, calma y paz.
Sigamos celebrando la Resurrección del Señor con mucha alegría, que esta experiencia nos regale valentía, unidad, nueva vida, fraternidad, paz, fe y fuerzas para seguir adelante.
Hagamos el ejercicio este domingo o esta semana de leer esta reflexión observando detalladamente el cuadro de la Divina Misericordia.
Bienestar y paz para todos.
Con aprecio.