Con motivo de la celebración mundial del enfermo celebrado el pasado 11 de febrero en diversas parroquias de la diócesis se realizaron varias jornadas de Unción y confesiones en las distintas vicarias.
Fue el momento propicio para orar fuertemente por la salud de los enfermos físicos y espirituales invocando el poder sanador del Espíritu Santo, que obra en la Unción de los Enfermos.