El gran signo de este tiempo de adviento, preparación a la Navidad, es la corona y ésta se adorna en un lugar visible en el templo o en nuestros hogares.
La forma circular de la corona nos representa a Jesucristo ayer, hoy y siempre, el eterno, sin principio ni fin.
Los 4 cirios encendidos simbolizan los cuatro domingos que anteceden a la Navidad.
Los 4 colores representan los cuatro valores que iluminan este tiempo y que se irán encendiendo cada domingo.
El color MORADO del primer domingo nos recuerda LA CONVERSIÓN, el arrepentimiento, el cambio de vida.
El color VERDE del segundo domingo, simboliza el valor de LA ESPERANZA que debemos cultivar para llevar una vida con optimismo y paciencia ante las promesas de Dios.
El color ROJO o ROSADO del tercer domingo, significa EL AMOR, LA TERNURA, LA ALEGRÍA que embellecen este camino al encuentro con Jesús.
Finalmente, el color BLANCO del cuarto y último domingo de adviento nos remite al valor de LA PAZ y a LA GRACIA que recibimos de Dios en este nacimiento.
Que al encender cada cirio le pidamos a Dios para que florezca ese valor en nuestras vidas, hogares y comunidades.
Vivamos con mucha fe este nuevo adviento.
Con aprecio.